La ingenua aún no sabe regatear, pero ya tiene madera de empresaria. La cantidad propuesta de 500 euros le servirá para cogerle el gusto a la dulce vida y conocer mejor diferentes pollas. La ucraniana es muy apetecible y decidida. Una vez que ha surgido la oportunidad de follar cerca del coche, no puede dejar pasar la oportunidad. Su coño mojado sólo agradecerá a su dueño.
Digámoslo así. Cada hombre se merece la mujer que tiene. En este caso, el marido es un holgazán. La mujer trajo al cabrón y en lugar de echar inmediatamente a la esposa y al amante de la casa, se limitó a decir unas frases de objeción que no tenían ningún peso entre esos dos. Una humillación aún mayor fue cuando, después de que su esposa había sido follada, cogieron y salpicaron de semen la cara del marido y éste volvió a dar una bofetada.
Me gustaría follarte igual