Las japonesas son todas naturales: pechos y coño. No se inyectan silicona, no se afeitan. Y a los hombres les encanta. Y yo le metería la mano en el coño en lugar del dedo, para que se afeite el coño la próxima vez. Por supuesto, estas hembras domésticas fingen que son tan tímidas e indefensas, pero el jugo que gotea demuestra que a ella le gusta mucho. Y el marido le masturba el clítoris a su antojo: ¡ella es sólo un juguete para su pene!
El título no le hace justicia en absoluto. La rubia se lo hace con el tío solo. No son tres. El hombre sí que se lo ha montado bien. Ella está toda recta. Lástima que ella y él no se hayan desnudado del todo. No es un video muy bueno. Y el final no es espectacular. Sólo pinchazos. Aunque la pareja es bastante atractiva, pero no me excitó. El vídeo me resultó completamente indiferente.